El Gobierno nacional anunció un plan de reestructuración para el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), que incluye despidos, la no renovación de contratos de personal no permanente y la venta de inmuebles. Estas medidas generaron una fuerte preocupación en el ámbito laboral y científico, especialmente en Concordia, donde se estima que al menos ocho empleados podrían perder sus puestos de trabajo.
Fernando Bello, delegado del INTA Concordia e ingeniero en alimentos, calificó estas medidas como un intento de desmantelar el organismo. En diálogo con Radio Pública, afirmó: “El personal está con un grado de incertidumbre muy grande, hay compañeros que se están enterando de que a fin de año podrían no continuar trabajando. Estas decisiones no obedecen a una política institucional clara, sino a una búsqueda de titulares que digan cuántas personas fueron despedidas del Estado”.
Bello señaló que, en los últimos meses, el INTA ya había implementado ajustes mediante retiros voluntarios, incentivando la jubilación de empleados con experiencia. Además, denunció que esta política se extiende ahora a la no renovación de contratos de trabajadores no permanentes, afectando a personal con conocimientos claves para las funciones del instituto.
En la Estación Experimental de Concordia, las medidas impactarían directamente sobre ocho empleados contratados bajo la modalidad de planta no permanente, quienes podrían quedar sin trabajo al finalizar el año. Bello destacó la importancia de estos puestos, aclarando que el ingreso al INTA se realiza exclusivamente por concurso y que el número de empleados no ha aumentado en los últimos años, como algunos sectores argumentan.
“Hoy en día, con esta política de no renovar la planta no permanente, estamos hablando de casi ocho personas en nuestra experimental que quedarían sin trabajo. La cantidad de trabajadores en Concordia se ha mantenido estable desde hace años, no es cierto que haya un aumento. Estas decisiones no solo son injustas, sino que afectan a personal altamente capacitado”, sostuvo Bello.
Los trabajadores de Concordia se acercaron a la Estación Experimental para manifestar su preocupación y apoyar el pedido de que las medidas sean revisadas. La decisión final sobre la continuidad de los contratos está en manos del Consejo Nacional del INTA, aunque Bello expresó cautela respecto al desenlace. “Esperemos que no sea un rechazo total y que se puedan mantener los puestos de trabajo”, agregó.